"Fuerzas del destino" el primer libro de Ivana Butus

"Fuerzas del destino" el primer libro de Ivana Butus se presentará el sábado 27 de enero a las 19hs en el Club de Nuestros Sabores

¿Cómo es que nace la idea de escribir?

Nace hace un año y medio atrás, más o menos. Con los libros, con el mundo de la lectura y de la escritura, yo estaba alejada. Pero surge a raíz de la necesidad de que yo me sentía como estancada. Me decía a mi misma "no puede terminar lo mío acá". Si bien, tengo mi carrera, tengo mi familia, necesitaba hacer algo más.

Algo mío, que nazca como de mí. Pero no sabía qué. Empecé a hacer ese caminito interior de introspección, de buscar mi talento. O qué era eso que yo quería hacer que me motivaba realmente a despertarme temprano por la mañana, que me hace levantar, sin nada a cambio. Entonces, así empezó, con unos ejercicios, unas técnicas. Y me dio que era escribir. En realidad era la expresión. Escribir fue lo que ahí me hizo como un clic. Que yo tampoco sabía. Yo me descubrí en ese momento. Imagínate cuando lo conté acá en mi casa.

"Todos me miraron y me dijeron, ¿te gusta escribir? Pues, parece que sí"

Primero lo hablé con mi esposo. Le conté lo que quería hacer. Que yo sentía que había algo interior que me movilizaba. Yo digo que tuve un despertar.

Lo hablé con él porque es mi equipo, mi familia es mi equipo y nosotros que somos los adultos comandamos este equipo. Así que me siento con él y le cuento. Y él lo primero que me dice, ¿qué te gusta escribir? ¿desde cuándo? Yo tampoco lo sabía.

Tenía dos caminos. O escribía para mí, como tipo un diario, me escribía mis novelas que eran para mí. O escribía para que otros te lean, digamos. La diferencia es grande. Porque tenés que capacitarte, trabajar con las redes. O sea, se abrió un mundo que no era solamente escribir y nada más.

Hubo que reestructurar un poco la vida familiar, principalmente un poco yo, porque era la que estaba más metida con esto. Y el me dijo que sí. Bueno, "vamos para adelante" fue su expresión.  Y sin su apoyo, no lo hubiese logrado.

¿Cómo complementas tu profesión?

Lo mío- la microbiología en sí- es un poquito más analítica y eso, lo canalizo por medio de mi trabajo, por el trabajo que tengo en Silmag desde hace varios años. Y en lo que hace a esta parte un poco más artística, si se quiere, me he tenido que organizar para poder hacerlo.

Yo venía con un ritmo de vida, cambié todos mis hábitos, desde el horario en que me levanto y desde que tengo siempre en mi cartera un libro. Ha sido una incorporación de hábitos que no los tenía, de leer dos libros por mes, más o menos en promedio, que es lo que tengo que leer, para tener un poco más de caudal de palabras, un poco más de ideas.

"Momentos, tiempos libres o tiempos muertos yo los ocupo con un libro, estoy en el médico o esperando algo, me pongo a leer, siempre llevo conmigo una libretita y un lapicito y por ahí me vienen ideas y anoto"

A partir de que vos descubriste que era la expresión lo que necesitabas, ¿Cómo lo trabajaste para llegar a pensar en tu libro?

Tener una buena idea no significa que puedas escribir un libro, tener una linda idea, digamos. Lo que empecé a hacer fue asesorarme un poco y me di cuenta que, necesitaba instruirme en lo que es el mundo de la escritura. Tomé cursos gratis al principio y después por YouTube, empecé buscando, hay dos personas a las que sigo que me gustan, me sirvieron de base porque, no sabía yo mucho de esto, así que aprendí de ahí.

También tomé otros cursos con arancel y ya tenía las bases mínimas sumada a la ayuda de correctores a los que le enviaba lo que iba escribiendo y recibía una devolución desde la gramática, el estilo. Con el paso del tiempo, hablé con Tinta Libre, que es esta editorial que me acompaña y le dimos forma a este proyecto.

¿Y por qué una novela? ¿Qué te inspiró? ¿En qué se basa?

Siempre fui como muy novelera, desde chica. Siempre yo veía películas románticas en las que era yo la actriz ahí en la novela. Entonces, me gusta mucho este género, que haya un contenido reflexivo, o sea, que vos puedas, tener algún tipo de herramienta, que te deje algo el libro, digamos, que no te deje un contenido vacío.

¿Y en qué te inspiraste?

Al ser novela romántica, amor tiene que haber. Pero esta novela, como que cruza distintos ámbitos o distintos temas, desde la batalla interior que uno tiene, la familia y en qué pilares uno se va agarrando, va tomando, a medida que tiene que ir resolviendo esos dilemas internos, esos problemas internos.

Arrasa con un montón de temas que a mí me movilizaban. No sé cómo le llegará al lector pero a mí hay algunas partes que sí, que terminaba como lagrimeando, porque es más, como la tenemos que leer tantas veces para corregirla y corregirla, siempre yo lloraba en los mismos lugares.

¿Qué escenarios tiene tu novela?

Es una novela narrada en Argentina con distintos escenarios: las Sierras de Córdoba, están ahí presentes. Tiene algo de playa, algunos sitios en Buenos Aires, que es donde el protagonista después estudia. Y Bariloche también hay un poquito. Se mueve por distintos escenarios y los personajes están siempre muy dinámicos. Es una novela bien dinámica. Los personajes están en acción permanente. Siempre está sucediendo algo y terminás un capítulo y pasa algo en el siguiente que te va atrapando.

Es una novela corta, de 8 capítulos, yo digo que por ahí para la gente que no está acostumbrada a leer mucho, está buena como para empezar con ese hábito. Aparte te va llevando. Como dijo acá un escritor vecino que es Nato López, "sale como piña" (risas).

¿Y qué tiempo te llevó a escribirlo?

Capaz que un año. Porque iba haciendo capítulos, iban, volvían. Yo cuando empecé con Tinta Libre estaba al 70%. Y me faltaban unos capítulos. Ellos iban corrigiendo una cosa y yo iba terminando. Así que como que íbamos y veníamos, lleva un tiempo, un tiempo importante. Y aparte es el primero. Entonces uno, es más inexperto, estás emprendiendo en un mundo totalmente nuevo. 

¿Y qué representa para vos hoy tenerlo en mano? 

Lo veo al libro, y me digo ¿cómo hice? Porque hay que amalgamar todo. Yo sé que todo el mundo en su casa trabaja y hace un montón de cosas, pero yo le sumé otra cosita más, además del trabajo que la mayoría tiene, de los hijos y de las actividades diarias, me puse otra cosita más.

Y no solamente era escribir, sino ir estudiando, porque no sabía mucho de este mundo. Ir leyendo. Y además era como casi una condición obligatoria también trabajarlo en las redes. También cuando empiezo con todo esto, me dijeron "abrite las redes sociales". Y bueno, estar activa en las redes, más allá de que sea hermoso, no deja de ser un trabajo al que todos los días le tenés que dedicar tiempo, no hubo un solo día del año este que pasó que yo no me hubiese dedicado al libro. Ya sea escribiendo, leyendo, corrigiendo. Todos los días un poquito, para conseguir, en este caso, mi objetivo.

"Y así es como yo le digo a mis hijos. Si ustedes quieren lograr algo, es todos los días un poquito"

¿Qué expectativas tenés?

Cuando yo escribí este libro, quería dejar como un mensaje. Que no sea como una historia vacía. Obviamente me gustaría que la gente lo compre y lo lea, pero mi primer éxito creo que es haberlo logrado, tenerlo en la mano.

Si uno mira para atrás y todo lo que hubo que acomodar, para lograr este librito pequeño, es muchísimo trabajo. Ahora quiero obviamente que la gente lo conozca.

Entré en el mundo de los bookstagrammers, influencers en lo que es la materia de libros, ellos si así lo desean y les interesa lo leen, hacen una reseña y lo publican en su comunidad, una forma de colaboración muy buena entre ellos y nosotros, los autores.

¿Y vos creés que esto abre puertas para otros libros? ¿Te gustaría volver a escribir?

Sí, sí me gustaría. Yo estoy disfrutando este, pero...ya estoy digamos, ¡escribiendo otro....! ya tengo escrito algo así a mano alzada, en un borrador que tengo, otra historia. Y lo que me gusta es que es totalmente distinta a esta. O sea, muy distinta. Esta es como muy dulce de leche, como digo yo. Y la otra es muy distinta. Pero sí, ya tengo algo, ya estoy escribiendo.

En el paso a paso de todos estos meses, ¿Te ha permitido crecer como escritora el hecho de vincularte con la Editorial?

Sí, sí, me ha permitido aprender. Principalmente con los tiempos, con las correcciones que desconocía. Si bien se te plantea en el plan inicial, yo era la que iba cambiando cosas. Porque cuando yo empecé a escribir, tenía un nivel de conocimiento. Y cuando ya estaba en los últimos capítulos, ya tenía mucha lectura, mucho aprendido con los correctores.

Fui cambiando un poco la trama en algunos lugares y volver a escribir en otros de otra manera. Como empecé, no es más lo mismo que cómo cuando terminé. Yo lo revisé muchas veces al libro. Revisaba yo, revisaba la editorial, volvía. Yo metía cambios. Y así. Era un ida y vuelta. Hay un método para revisar que tienen, me imagino que deben ser comunes para todas las editoriales, con formularios por fila, por renglón. 

¿Cómo lo vive la familia?

Como familia tenemos un proyecto en común. Y también disfrutan hoy de esto. Por ejemplo tuve que ir a buscar la caja que llegó con todos los libros y si bien me acompañó mi hijo más chico, cuando volvimos todos acá esperaban Tengo una emoción. Mucha emoción.  

¿Ahora estás con la pre- venta? 

Si en realidad son lineamientos que la editorial te pide que vos sigas para hacer una promoción digamos adecuada y correcta del libro, un pre lanzamiento, una pre-venta y ahora estamos en esta etapa.

La pre-venta cierra el 8 de enero a las 5 de la tarde, toda la gente que desea adquirir el libro en mi instagram está el link de compra, entonces pueden acceder ahí y comprar y luego yo los entrego el día de la presentación formal. 

La idea es poder entregárselo y firmárselo a quien lo compre en el Club de Nuestros Sabores, donde elegí presentarlo el 27 de enero a las 19hs para hablar un poco del recorrido del libro y agradecer a los que me han acompañado, a mi familia, a la comunidad de las redes, realmente tan generosos porque te dan opiniones y aportan valor a esto.

También voy a llevar algunos ejemplares más por si alguien quiere adquirirlo ahí o si no pueden ir a escuchar simplemente y a compartir el momento.